El Novillo gordo ganó US$ 0,60 por kilo este año y es el único país del Mercosur en el que el ganado gordo tuvo una trayectoria de precios ascendente y se mantiene sólido.
La industria bajó fuerte la faena la semana pasada, sin alcanzar las 35.000 cabezas, pero ni de ese modo hubo un cambio en la tónica.
En todos los casos las entradas a frigorífico están ágiles, alrededor de una semana.
Se entiende a nivel de los operadores ganaderos, que como no hay oferta, por más que salgan a pagar, no va a aparecer ganado.
No obstante, la necesidad de faenar puede hacer subir algún centavo más. Hay que ver cómo se comporta la faena cuando comience la venta de cuota, por lo que hay que observar, una posible menor presión de compra a partir de la última semana de julio.
Los ganados van apareciendo cada vez más justos en terminación, pero la industria ha flexibilizado sus exigencias.
La faena pasó de 41.201 a 34.996 vacunos en la última semana. Hay plantas que no están activas y otras con menor operativa. Una parte importante de la faena proviene de corrales-
Hay plantas frigoríficas que están trabajando con cuadrillas kosher y mientras estén operando el mercado seguirá firme.
GRAFICA BASE BLASINA / ASOC.