Las categorías más pesadas fueron las que ajustaron más, pero en general fue un remate con bastante puja por los lotes
El presidente del consorcio, Carlos De Freitas, comentó que el nivel de ventas fue bueno, y que en varias categorías se dieron ajustes de precios, que eran esperados por los escritorios. Algunos precios bajaron –los de las categorías más pesadas– pero eso era esperable, coincidió Ignacio Victorica, integrante del consorcio. “Estaba dentro de lo previsto. Las categorías más pesadas fueron las que ajustaron más, pero en general fue un remate con bastante puja por los lotes. Fue un remate ágil y dinámico”, aseguró el empresario.
De Freitas destacó que el primer día de ventas fue más ágil y las categorías más livianas se destacaron más, por ejemplo, los terneros de menos de 140 kilos se colocaron en su totalidad, con un aumento de 0,22% con respecto al remate anterior.
Otras categorías como las de vientres preñados o vaquillonas también tuvieron ajustes a la baja, y en estas “el mercado estuvo un poco más selectivo”, comentó. Sostuvo además que los ajustes eran esperados y que los precios se vieron influidos por los movimientos de valores en el mercado del gordo –que han tenido bajas – y también por el clima. Según remarcó, se esperan con ansias las lluvias pronosticadas.
La venta se hizo en dos jornadas desde el Hotel Cottage, con la financiación del Banco República y varias herramientas financieras y beneficios para los clientes, como un plazo de 90 días libres para todas las categorías y 180 días para los vientres preñados, el Crédito Plus, el Fideicomiso BROU, el seguro ganadero, la calculadora de Precio Justo y descuentos de 2% y 1% por pagos al contado y preofertas.
El consorcio hará su próximo remate en tres jornadas: el miércoles 5, jueves 6 y viernes 7 de octubre, esa será la edición 254.