ARU insiste por "rebrote" del abigeato y reclama respuestas sobre competitividad y presión fiscal

Estos temas habían sido abordados dias pasados en entrevista concedida a CharruaTV Agronoticias en el marco del cierre 2025 de la SCHU

En declaraciones públicas el presidente de la ARU Rafael ferber, insistió en temas que maracó como preocupantes en entrevista recientemente concedida a CharruaTV. La ARU mantiene una agenda clara: seguridad rural, presión fiscal y competitividad. Son temas que ya habían sido planteados en el cierre anual de la Sociedad Hereford y que hoy vuelven a ocupar el centro del debate. La gremial insiste en que, sin respuestas concretas, el sector agropecuario enfrentará un 2026 marcado por la incertidumbre.

La Asociación Rural del Uruguay (ARU) volvió a encender las alarmas sobre la seguridad en el interior del país, tras una reunión mantenida con el ministro del Interior, Carlos Negro. El presidente de la gremial, Rafael Ferber, insistió en que el abigeato registra un repunte significativo y reclamó mayor agilidad judicial para enfrentar los delitos rurales. Además, planteó preocupaciones sobre la competitividad del sector y la presión fiscal que enfrentan los productores.

Seguridad rural: el abigeato como amenaza estructural

El robo de ganado, conocido como abigeato, no es un delito menor en Uruguay: afecta directamente la rentabilidad de los productores, erosiona la confianza en el sistema de seguridad y golpea la identidad cultural del campo.

Según Ferber, las denuncias crecieron un 14% en el último año, aunque existe la percepción de que muchos casos no se reportan.

El dirigente recordó que este fenómeno no solo implica pérdidas económicas, sino también la proliferación de faena clandestina, que distorsiona los mercados y pone en riesgo la inocuidad alimentaria.

La ARU reclama mayor coordinación entre Policía y Justicia, señalando que las demoras en allanamientos y procedimientos judiciales generan frustración en los productores.

En paralelo, los copamientos rurales —delitos violentos en establecimientos— si bien han disminuido, siguen siendo motivo de gran preocupación por el impacto emocional en las familias.

La gremial insiste en que la seguridad rural debe ser tratada como un tema de Estado.

Antecedente: advertencias en la Sociedad de Criadores Hereford

Ferber ya había advertido sobre estos problemas en la entrevista concedida a CharruaTV durante el cierre anual de la Sociedad de Criadores Hereford del Uruguay.

Allí subrayó que la inseguridad rural y el atraso cambiario son factores que “erosionan la confianza y la capacidad de inversión de los productores”.

La reiteración de estos reclamos muestra que la ARU mantiene una línea de seguimiento constante y que las preocupaciones no han sido resueltas.

El 1% municipal: una carga fiscal en debate

El llamado 1% municipal es un tributo que grava la actividad agropecuaria y que ha sido cuestionado por la ARU desde hace años.

Aunque el Poder Ejecutivo ha mostrado disposición a revisarlo, las intendencias mantienen resistencia por temor a perder recursos presupuestales.

Para los productores, este impuesto representa un costo adicional que se suma a otros gravámenes y recargos, afectando la competitividad del sector.

Ferber reclamó una solución que garantice la continuidad de los fondos municipales sin que recaiga exclusivamente sobre el agro, advirtiendo que la falta de definición genera incertidumbre y desigualdad entre departamentos.

Competitividad y tipo de cambio: el dilema del dólar

El atraso cambiario es otro de los puntos críticos señalados por la ARU. Ferber describió la situación como “un golpe diario a la competitividad”, ya que el dólar se mantiene en niveles bajos mientras los costos internos siguen creciendo.

En un país donde la ganadería y la agricultura dependen de la exportación, un tipo de cambio desfavorable reduce los márgenes de rentabilidad y limita la capacidad de inversión.

La gremial cuestiona el ritmo de la política monetaria y advierte que, si no se ajusta, sectores como la lechería, el arroz y la forestación podrían quedar en desventaja frente a competidores internacionales.

Expectativas hacia 2026: precios estables, industria en tensión

De cara al próximo año, Ferber proyecta estabilidad en los precios ganaderos, lo que da cierta tranquilidad al productor. Sin embargo, la industria frigorífica enfrenta dificultades de rentabilidad aun con valores altos del ganado.

La ARU advierte que el problema no está en el precio del novillo, sino en los costos adicionales de la industria, que limitan su competitividad. El desafío para 2026 será encontrar un equilibrio que permita sostener la cadena cárnica, uno de los pilares de la economía nacional.